Periscopio internacional 28/Octubre – Una mirada sobre Brasil
Periscopio internacional 28/Octubre – Una mirada sobre Brasil
Los partidos de la base del gobierno Lula vencieron la primera vuelta de las elecciones municipales de 2008, realizadas el último 5 de octubre. Analizando aisladamente los partidos, el PT obtuvo el mejor desempeño relativo.
Sin embargo, al mismo tiempo que conmemora los resultados, el PT se propone a solucionar problemas que pueden dificultar su desempeño en la segunda vuelta de 2008, la victoria en las elecciones presidenciales de 2010 y el papel del Partido a mediano y largo plazo.
En la primera vuelta de 2008 el primer colocado en número de alcaldías fue el PMDB, con 1.195; el segundo colocado fue el PSDB, con 783; el PT conquistó 548 alcaldías.
En las elecciones municipales anteriores, el número de alcaldes/as del PT fue el siguiente: 411 (2004), 187 (2000), 116 (1996), 54 (1992), 37 (1988) y 2 (1988).
Los partidos que más crecieron en número absoluto de alcaldías en relación a 2004 fueron: el PMDB (con 138 alcaldías a más); el PT, con 137 alcaldías a más; y el Partido Socialista Brasileiro, con 133 alcaldías a más. Ya el PSDB perdió 88 alcaldías; y el DEM, también de la oposición de derecha, perdió 294 alcaldías.
Si consideramos los resultados porcentuales, el crecimiento del PT fue del 33%, superado por el del PCdoB (con 300%, que pasó de 10 a 40 alcaldías), por el PSB (76%, que aumentó de 176 para 309 alcaldías) y por el Partido Verde (38%, que pasó de 56 para 77 alcaldías).
Sin embargo, el número total de alcaldías es un indicador parcial, ya que entre los 5.528 municipios de Brasil hay ciudades de diferentes tamaños.
Si tenemos en cuenta la población de las ciudades, veremos lo siguiente: en 2008, el PT venció las elecciones en 277 ciudades con menos de 10 mil habitantes (contra 210 en 2004 y 77 en 2000); vencimos en 121 ciudades que poseen de 10 a 20 mil habitantes (contra 76 en 2004 y 28 y en 2000); vencimos en 82 ciudades entre 20 y 50 mil habitantes (contra 58 en 2004 y 31 en 2008); vencimos en 45 ciudades entre 50 y 150 mil habitantes (contra 36 en 2004 y 26 en 2000); y vencimos en 23 ciudades que poseen más de 150 mil habitantes (contra 22 en 2004 y 25 en 2000).
Teniendo en cuenta la votación total del electorado, veremos lo que sigue: en 2008, el PT obtuvo 16.486.025 votos (16,6%). Ello significó un avance en relación a las elecciones municipales de 2000 (cuando obtuvimos 11.938.734 y 14,1%, respectivamente) y una pequeña reducción en relación a 2004 (cuando obtuvimos 16.326.047 y 17,2%, respectivamente).
Este resultado nos sitúa en segundo lugar, atrás del PMDB (18.422.732 y 18,6%) y adelante del PSDB (14.454.949 y 14,6%). Es importante registrar que el PSDB fue el más votado en las elecciones municipales de 1996 y 2000. Ya el PT fue el más votado en las elecciones de 2004.
Es probable que la reducción porcentual del PT en relación al resultado que se obtuvo en 2004 esté relacionada al hecho de que el Partido llevó a cabo en 2008 una política de alianzas que lo llevó a no lanzar candidatos en ciudades extremadamente pobladas (Belo Horizonte, Goiânia, Campinas, São Luís, Duque de Caxias, João Pessoa, Cuiabá, Aracaju, São João do Meriti, Campos), que sumadas poseen cerca de 5.464.000 electores.
Vale decir que el PT amplió en un 13% el número de concejales electos (de 3.679 en 2004 para 4.166 en 2008, de 7,1% para 8%), pero redujo el número porcentual de votos obtenidos (de 10,7% para 10,3%). Este es uno de los motivos que hace que sea necesario analizar la relación costo/beneficio de las coligaciones electorales que se efectuaron en todo el país. El partido que más creció en número de concejales fue el PSB (1.124 nuevos parlamentarios), seguido del PRB (775 nuevos concejales).
Como vimos hasta ahora, el PT es el tercer colocado en número total de alcaldías y el segundo colocado en número total de votos. Sin embargo, es el Partido que obtuvo mejor desempeño en las 79 mayores ciudades brasileñas (capitales y/o ciudades con más de 200 mil electores).
En estas 79, el PT eligió 13 alcaldes en la primera vuelta y disputa la segunda vuelta en otras 15 ciudades. Es decir: el PT podría llegar a gobernar 28 de las 79 mayores ciudades de Brasil. En segundo lugar están empatados el PMDB y el PSDB: cada uno de ellos eligió 9 alcaldes en la primera vuelta y disputa la segunda vuelta en 11 ciudades. O sea, uno de ellos podría llegar a gobernar 20 de las mayores ciudades brasileñas.
El resultado de la segunda vuelta (especialmente en las capitales) puede consolidar el resultado de la primera vuelta, en un doble sentido: una victoria del gobierno y una victoria del PT. Sin embargo, también puede permitir que la oposición recupere el espacio perdido, especialmente por el DEM (cuyos votos pasaren de 11,8% en 2004 para 9,4% en 2008) y por el PSDB (que pasó de 16,5% de los votos en 2004 para 14,6% de los votos en 2008).
Es importante registrar que el desempeño del DEM solamente no fue peor debido a la votación que Kassab obtuvo en São Paulo, aproximadamente 23% de la votación total de los Demócratas en todo Brasil. El DEM obtuvo este año 9.291.086 votos o 9,4% del total (contra 12.973.544 y 15,4% en 2000 y 11.238.408 y 11,8% en 2004).
En la segunda vuelta, que se llevará a cabo el 26 de octubre, 26.843.804 electores volverán a las urnas en 29 ciudades, 11 de las cuales son capitales.
Las capitales en las que habrá segunda vuelta son las siguientes: Manaus (AM), Macapá (AP), Salvador (BA), São Luís (MA), Belo Horizonte (MG), Cuiabá (MT), Belém (PA), Rio de Janeiro (RJ), Porto Alegre (RS), Florianópolis (SC) y São Paulo (SP).
Las otras 18 ciudades en que habrá segunda vuelta son las siguientes: Vila Velha (ES), Anápolis (GO), Contagem (MG), Juiz de Fora (MG), Montes Claros (MG), Campina Grande (PB), Londrina (PR), Ponta Grossa (PR), Petrópolis (RJ), Canoas (RS), Pelotas (RS), Joinville (SC), Bauru (SP), Guarulhos (SP), Mauá (SP), Santo André (SP), São Bernardo del Campo (SP) y São José do Rio Preto (SP).
En los tres estados más poblados del país habrá segunda vuelta en las capitales: São Paulo (SP), Belo Horizonte (BH) y Rio de Janeiro (RJ).
En São Paulo, la candidata del PT Marta Suplicy enfrentará a Gilberto Kassab (DEM y apoyado por el PMDB), que también contará con el apoyo del PSDB del gobernador José Serra.
En Rio de Janeiro, el candidato Eduardo Paes (actualmente en el PMDB, pero que en el pasado fue integrante de la tropa de choque del PSDB) enfrentará a Fernando Gabeira (del PV, apoyado por la TV Globo y profundo enemigo del PT).
En Belo Horizonte, el candidato Márcio Lacerda (actualmente en el PSB y apoyado por el PT, pero en realidad un candidato del gobernador Aécio Neves, del PSDB) enfrentará a Leonardo Quintão (del PMDB).
El PT también disputa la segunda vuelta contra el PMDB en dos otras capitales: Salvador y Porto Alegre.
La segunda vuelta será, por lo tanto, una tríplice medición de fuerzas: entre el gobierno y la oposición; dentro de la base del gobierno, entre PT y PMDB; y dentro de la oposición, entre Serra y Aécio.
En lo que se refiere a la disputa en el interior del PSDB, Serra fue el vencedor. Llevó su candidato en la capital de São Paulo (Gilberto Kassab, del DEM) a la segunda vuelta, en primer lugar, superando el PT y el propio candidato oficial del PSDB (Geraldo Alckmin).
Por otra parte, Aécio Neves sufrió derrotas importantes para el PT en el interior del estado de Minas Gerais; y salió debilitado de la elección en la capital del estado, Belo Horizonte, donde su candidato Márcio Lacerda, a pesar de contar con el apoyo del alcalde Pimentel, del PT y del gobernador del PSDB, no logró vencer en la primera vuelta.
En lo que concierne a la base del gobierno, sea cual sea el resultado de la segunda vuelta, hay un fortalecimiento del PMDB, del PSB y del PCdoB. Este último pasó a gobernar una capital (Aracaju) y puede llegar a gobernar otra (São Luís). Al mismo tiempo, es evidente el debilitamiento de Ciro Gomes, cuya candidata perdió las elecciones en Fortaleza, capital de Ceará, su principal base política.
En lo que atañe al gobierno como un todo, se comprobó que la capacidad de transferencia de votos por parte de Lula existe y es fuerte, pero no se traduce automáticamente en votos para los candidatos del PT o de la base. En realidad, el ambiente positivo existente en el país, que se expresa en el 80% de aprobación popular de Lula, impactó positivamente entre los candidatos a la reelección y entre los que competían con el apoyo de alcaldes bien evaluados.
De las 7 capitales que gobierna actualmente, el PT venció en las elecciones de 2008 en 6 de ellas ya en la primera vuelta. Con excepción de Belo Horizonte, donde el PT local desistió de presentar candidato y realizó una coligación de hecho con el PSDB, a la contramano de la política nacional de alianzas del PT, lo que le hizo sufrir una derrota política en la primera vuelta y le puede llevar a una derrota electoral en la segunda vuelta. Entre los 411 alcaldes/as electos/as en 2004, el PT logró la reelección en 230 ciudades, una tasa del 56% (en segundo lugar aparece el PSB, con 45,5%; y el PDB, con 43,8%).
La principal disputa en la segunda vuelta sin duda es la que se llevará a cabo en la capital de São Paulo. Se trata de una elección difícil, ya que la derecha demostró que es capaz de producir y manipular eficazmente el rechazo al PT.
Es importante diferenciar el anti-petismo de derecha, muy evidente en São Paulo, pero también presente en otros centros urbanos y en estados como Paraná, Santa Catarina y Mato Grosso do Sul, del surgimiento de un electorado a la izquierda del PT, caso de Porto Alegre, donde la votación obtenida separadamente por las candidaturas del PCdoB y del PSOL superó la barrera del 20% de los votos.
En el primer caso, el PT tendrá que analizar la base social, el discurso y los mecanismos de reproducción de una derecha reaccionaria y militante contra nosotros. Además, tendrá que estudiar las determinantes regionales de este voto militante anti-petista, que se manifiesta con mucha fuerza en el sudeste y en áreas del sur (con la notable excepción de Rio Grande do Sul, donde el PT obtuvo un excelente resultado) y centro-oeste, mientras en el nordeste el PT se consolida cada vez más.
En el segundo caso, el PT tendrá que discutir cómo crear mecanismos que permitan solucionar las disputas en el interior de la izquierda, para evitar desastres políticos y electorales como el que ocurrió en la ciudad de Rio de Janeiro.
Vale decir que, de manera general, la izquierda no petista que creció en estas elecciones forma parte de la base del gobierno. La ultraizquierda (PCB, PCO) y el PSOL, este último con raras excepciones, tuvo un desempeño poco significativo.
Por fin, una cuestión fundamental: la crisis internacional no impactó el resultado de las elecciones en la primera vuelta. El agravamiento de la crisis y sus primeros efectos en el país impactarán, ¿en qué medida y a favor de quién, el resultado de la segunda vuelta?